Recuperando sensaciones

MADRID 8ª de San Isidro - Lleno

Hay tardes que van más allá. Llegan mucho mas allá, a lo emocional. Esta fue una de ellas. Con muchos detalles y en la que recuperamos dos de las cosas más importantes para que este arte siga vivo, la sensación de peligro y la emoción.

Esperábamos al francés con ganas de volver a la senda del triunfo. Sebastián no defraudó con su actitud. Tras el primer cite de lejos con la muleta, resultó corneado en la ingle. Se levantó sabedor de que llevaba la cornada y continuó con la faena. Llena de emoción y con esa sensación de peligro que echamos en falta muchas tardes. Cosa alarmante la falta de sensación de peligro, que aleja al torero de la épica. Se produjo la paradoja de faltarnos el aire en cada muletazo del francés, debido al aire que palpábamos en el ruedo. Se empeño Castella en realizar la faena en los medios aún a sabiendas del peligro. Anduvo muy firme, bien de colocación, quedándose en la cara del toro antes de cada pase de pecho. El estoconazo que hizo rodar el toro sin puntilla le hizo valedor de una oreja de mucho mérito. En su segundo volvió a dar una dimensión de valor que calaba en los tendidos, al comenzar en los medios con estatuarios a pies juntos. Mientras el viento continuaba haciendo de las suyas. El animal parecía de otro encaste. Buscando al torero siempre a la salida de cada muletazo, con poco recorrido y mucho peligro. Tras una estocada caída y trasera pudimos ver un gran detalle de jefe de cuadrilla. Animó a su tercero tras varios fallos con la puntilla, le sugería calma y le dio su apoyo al acabar el trabajo.

José Maria Manzanares generó la polémica en los tendidos. Entre los cientos que respetan y apoyan al que se pone delante con buena actitud y unos pocos que se hacen valedores de la verdad del toreo. Comenzó a la verónica muy largo y templado. El viento cesó y el toro iba largo. Mientras intentaba comenzar la faena ya se oían los primeros pitos, a pesar de venir de una gran lidia, una vez más, de sus hombres de plata. Lo llevaba ligado, con cambios de mano y pases de pecho casi circulares.  Cierto es, que faltaba transmisión, pero no se debe reprochar por cargar la suerte si echar la "pata pa´lante" ¡que se puede! Pues enroscarse el toro en la cintura tiene un gran mérito y mucha más exposición ante el peligro. Ante esta situación es difícil generar triunfo, pues el ambiente se enrarece. En su segundo vimos lances a la verónica con mucho gusto y torería. Fueron cinco verónicas cerradas a una mano que obtuvieron acompasados olés. La cuadrilla tras la brega de Curro y los pares de Trujillo saludó, como es habitual. El alicantino continuó firme con un toro muy peligroso. Tiene otra tarde para cargar la suerte como él la entiende. El ambiente generado es merecedor de análisis, pero habrá tiempo...

El tercer espada era Alejandro Talavante, vestido de luto y plata por el fallecimiento de su abuelo. Acostumbrado a salir tras el torero más en forma del escalafón. Difícil papeleta y mucho mérito no volver la cara nunca. Demostrando compromiso con el coso donde estaba. Dejó constancia de llegar con ganas al realizar el quite por gaoneras en el primero de Manzanares. 

Nos brindó un toreo con el capote cargado de gusto y temple. Un quite con dos delantales, una chicuelina y cerrado con desprecio a una mano. Con la muleta generó emoción. Comenzando su faena al sexto por estatuarios y pasándose al toro muy ajustado por detrás. Se cruzó siempre, cosa que gusta en demasía en esta plaza. Estuvo seguro y firme ante su lote. Dejó muestras de su especial sensibilidad en unas trincherillas en el último de la tarde. Algo encimista con el burraco sexto, aunque no eran animales de trofeos, eran animales de figuras, y en eso, sí está el extremeño.

Toros de Victoriano del Río y Cortes (sexto) variados de presentación, peligrosos y con poca fuerza, aunque con calidad en las pocas embestidas que tuvieron.

Aplaudido en el arrastre el segundo.

Sebastián Castella (Chenel y Oro) Oreja y Silencio.

José Maria Manzanares (Purísmima y Oro) Ovación y Ovación.

Alejandro Talavante (Luto y Plata) Palmas y Ovación.

El Detalle: Alejandro Talavante, de forma muy emotiva, le brindó la muerte de su primer toro a su abuelo en los medios.

Fotografía: Alberto de Isidro http://www.alrededordeltoro.com/